Alguien se acuerda de ti
por algún motivo te piensan
sensaciones en el aire
que te llaman a gritos
en oídos sordos
que sabiendo ignoran los latidos del corazón.
La distancia marca la agonía
de estar presente solo en la mente,
una voz que te llama en la oscuridad
y a lo lejos el sentir
de ese alguien que se cruza
y por casualidad sentir
que te llaman y te llaman.
De pronto no entendimos
que la dimensión del amor
no es solo un capricho pasajero
de miradas y risas sentidas;
y es tan poco eso que no llega a colmar
hay que pasar túneles sin luz
inventar sobre la marcha
caminar sin camino
y guiarnos apoyados de la mano aquella
que con pureza
ayuda a atravesar todas las tormentas.
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